La hiperplasia benigna
prostática (HBP) se manifiesta con un agrandamiento de la próstata y su
prevalencia se vuelve mayor a medida que los hombres se hacen mayores. Tanto
así, que los estudios han determinado que la mitad de quienes superan los 65
años padecen de este mal.
Afortunadamente esta
afección no tiene consecuencias cancerosas; sin embargo, sí puede llegar a
disminuir la calidad de vida de aquellos hombres que tienen próstata agrandada.
En algunos casos, los síntomas no se manifiestan, pero en otros pacientes se
convierten en motivo de cirugía urgente.
Existe la posibilidad de
reducir los síntomas de la HBP utilizando un suplemento alimenticio compuesto
de soya y astrágalo, dos plantas reconocidas por sus beneficios para la
próstata y la salud en general.
El
agradamiento de la próstata
La hiperplasia benigna
prostática se caracteriza por ser una patología que va de la mano con el
desarrollo natural del género masculino. En otras palabras, el tamaño de la
próstata aumenta con la edad. Las cifras indican que menos del 10 por ciento de
los hombres sufre esta condición; sin embargo, el panorama comienza a cambiar
después de los 40 años.
De acuerdo con las
investigaciones, un 50 % de los hombres mayores de 65 años padece de HBP,
mientras que la cifra sube a 90 % cuando se alcanzan los 85 años. Además de la prevalencia
también aumenta la intensidad de los problemas.
Se conocen casos de
pacientes con próstata agrandada que no manifiestan ningún síntoma. En el
extremo opuesto están quienes sí notan los problemas de la enfermedad; algunos
con síntomas suaves y otros con dificultades bastante incómodas y dolorosas.
Dentro de las señales
más comunes de HBP se observan: problemas para orinar, flujo débil de orina, micción
frecuente, nicturia (ganas de orinar durante la noche), sensación de vejiga
llena luego de orinar y goteo constante, entre otras. Estos problemas se
convierten en un verdadero malestar porque los pacientes no pueden llevar una
vida normal.
Un
suplemento alimenticio favorable
La próstata agrandada
hace que los hombres corran el riesgo de desarrollar infecciones del tracto
urinario o de necesitar cirugía porque la orina no logra fluir. Una vez que el
médico detecta la enfermedad a través de las pruebas especializadas, podrá asignar
un tratamiento que mejore la HPB.
Los métodos de control
varían de acuerdo con la intensidad de los síntomas. Mientras que algunos
pueden superarlos cambiando sus hábitos diarios y tomando medicamentos, otros
necesitarán procedimientos no invasivos o intervenciones quirúrgicas.
Sin importar el
tratamiento asignado, existe un suplemento alimenticio compuesto por soya y
astrágalo que sirve efectivamente como terapia complementaria. Se llama UMOOZE y
puede reducir los síntomas de la hiperplasia benigna prostática en hombres
mayores de 65 años o de cualquier edad.
La soya es un alimento
que se consume con bastante frecuencia y se utiliza en la fabricación de
diversos productos, debido a todas las propiedades nutritivas y beneficios en
la salud. El estrágalo también se ha utilizado con éxito durante siglos para
promover la salud inmunológica y es efectivo en la prevención de varias
enfermedades.
El UMOOZE combina
extractos de soya y astrágalo para convertirse en un suplemento natural que
protege con firmeza la próstata y reduce los síntomas relacionados con una
glándula prostática agrandada.
Consumir dos tabletas
diarias de este compuesto será un excelente aporte para los hombres que quieren
mejorar su calidad de vida. Se olvidarán de los problemas a la hora de orinar y
de la necesidad constante de ir al baño, además de las otras dificultades
relacionas con la hiperplasia benigna prostática.
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