La inflamación de la
próstata debido a la hiperplasia benigna prostática ocurre generalmente en
hombres mayores de 40 años y su intensidad va aumentando con el paso del tiempo.
En muchos casos deteriora la calidad de vida, pues los síntomas pueden variar
desde leves hasta más fuertes y el tratamiento incluye medicamentos, terapias
no invasivas o cirugía.
Los problemas más
comunes de una próstata inflamada tienen que ver con la necesidad urgente y muy
frecuente de ir al baño, incluso durante toda la noche, además de dificultades
para orinar, dolor, goteo constante y flujo débil, entre otros.
Se ha descubierto que el
astrágalo y la soya son dos hierbas medicinales que podrían mejorar
notablemente los síntomas causados por la inflamación de la próstata. ¿Qué
vuelve especiales a estas plantas en el tratamiento de dichos problema? Sigue
leyendo para que lo conozcas.
Astrágalo,
una hierba milenaria
El astrágalo (Astragalus membranaceus)
se
utiliza en la medicina herbal desde hace más de 4.000 años por sus propiedades
tónicas y antipatógenas. Es un arbusto espinoso originario de China con un
sabor dulce que se ha vuelto común en la preparación de tónicos y productos
destinados al cuidado del corazón, los pulmones y el bazo.
En la actualidad se
recomienda como un elemento natural que ayuda al cuerpo a soportar situaciones
estresantes, además en el control de problemas de inmunidad, fatiga y la salud
en general porque refuerza el metabolismo y mejora el sistema inmunológico.
Sus beneficios se deben
a tres componentes esenciales:
1) Saponinas, se
encuentran en la raíz y tienen efectos diuréticos, antiinflamatorios y
antihipertensivos.
2) Flavonoides, usados
por sus características antioxidantes, ya que eliminan los radicales libres,
además de que previenen enfermedades cardíacas, cáncer y virus de inmunodeficiencia.
3) Polisacáridos, que
modulan el sistema inmune y sirve como antioxidante, antitumoral, antidiabético,
antiviral, hepatoprotector y antiinflamatorio.
Junto con la soya, el
astrágalo tiene gran eficiencia para aliviar los síntomas causados por los
problemas en la próstata. Asimismo, potencia el sistema inmune y lo protege de
los virus, ayuda contra la inflamación, ejerce una acción antioxidante, mejora
el soporte renal, tiene efectos antienvejecimiento y alivia los males en
pacientes sometidos a quimioterapia, entre otros.
Soya,
un alimento vitamínico
La soya (Glycine max) es, por otra parte, un
alimento de gran importancia que se originó en Asia. Se consume en forma de
frijol y contiene cantidades significativas de vitaminas, minerales dietéticos
y ácido fítico. Se ha convertido en un sustituto de la carne, gracias a las
proteínas que aporta, además de carbohidratos, vitaminas y minerales.
Está compuesta por una
cantidad saludable de elementos saludables, dentro de los que se pueden
mencionar:
- Isoflavonas (genisteína,
daidzeína y gliciteína), conocidas comúnmente como fitoestrógenos, que muestran
un apoyo en el tratamiento de cáncer de próstata y seno.
- Fosfolípidos, son unos
aceites que contribuyen a optimizar la estructura de la membrana celular.
- Saponinas, unas
sustancias investigadas por proporcionar diversos efectos biológicos, como anticancerígenos,
antiinflamatorios, antioxidantes y hepatoprotectores, entre otros.
- Ferritina, una proteína
que favorece el almacenamiento de hierro para combatir la anemia.
Junto con el astrágalo,
la soya ejerce un importante papel mejorando los síntomas causados por la
inflamación de la próstata, tales como corriente urinaria débil, sensación de
vejiga llena incluso después de orinar, necesidad frecuente de ir al baño a
cualquier hora y dificultad para comenzar a orinar, entre otros.
Asimismo se ha
demostrado que la soya puede aliviar los síntomas de la menopausia, aumentar la
actividad metabólica, prevenir la osteoporosis, reducir los niveles de
colesterol y curar trastornos del sueño.
No comments:
Post a Comment